La conciencia dormida

Ser segura; no estar segura.

No preguntar: saber, temer o preferir dudar.

Las respuestas correctas son las que no suscitan más preguntas.

Estoy segura de que las dudas, quizá, bueno, no sé, tal vez pueden ser buenas.

Muchas veces.

Siendo un mar de dudas, no sé hacia dónde nadar.

Avisto tierra

y ya estoy al corriente de que por ahí no es.

Encontré el único camino que no lleva a Roma.

No he visto mejor paisaje que cualquiera visto desde no cualquier regazo.

Y ni sé cómo acabé ahí.

Muchas veces.

Imagino las posibilidades: me excitan o me cortan el rollo.

Me rayo cuando veo líneas rectas.

Me pierden las curvas, tenía que decirlo.

Las olas cuando nadie me conoce.

Los hallazgos. 

El tatuaje que cubriste.

Un minuto de algodón de azúcar.

Los miedos que temen mis decisiones.

Y, sobre todo, la certeza de que no voy a arrepentirme de equivocarme.

Seguro.

Una respuesta a “La conciencia dormida”

  1. Wow. Se te ve más positiva, y me alegra…
    Me siento reconfortado al leer esas palabras.

    La emoción y el deseo q acompaña la foto en ig. Y la certeza q esas letras se han juntado desde el corazón.
    Congrats, great job.

    Le gusta a 1 persona

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: