Quiero conocerla más.

Conocer su pasado
al detalle.
Comprender cómo siente,
el por qué.
Aprender a hacerla reír.

Acompañarla en su camino
de la mano,
abrazados,
libres y separados
como sea
pero sí
cómplices
con la mirada
hablarnos.

Unidos por un sentimiento
único, puro, epicúreo,
impertérrito.

Vivir en su presente
interminable
deleitarme con su ahora
observar su mirada
a deshoras
tarde, noche y día
a todas horas.

Incansable.

Permanecer en su futuro
a su paso
al mío
al compás
sintiendo el cariño,
el afecto
eterno.

Mi único deseo
quererla
amarla
acobijarnos juntos
del invierno.

Prender una hoguera.
Dejar arder
malos recuerdos
amargos letargos
el miedo
el daño
quemarlos.

Crear de ello algo nuevo
sin par
sin más
sin dudar
sin truncar.

Ensueños de un poeta.

Que no sé
si enamorado
pero sí
maravillado
por el calor de su abrazo.

Su sonrisa me cala.

Mi sonrisa
lo avala,
lo deja registrado
siempre
que me veo
paseando a su lado.