Escribir sin pensar acaso pueda ser o no ser endípico absolutista de los de añada en alquiler de barrica de roble de Drake.
Estoy condenado a escribir por pura apuesta y apuesto; cada reestreno me estimula y encaballa.
Pero no de ninguna lata, más bien bajo la carpa como ejercicio funambulímico circense en un día soleado fundamentalmente basado en el arrelato*.
Si ahora me encontrara un rato no me importaría, la curiosidad me llevaría a observarlo y seguramente a disfrutarlo.
No sé por cuanto tiempo, hasta que mis nauseas o mi perro le enseñáramos los dientes y la puerta.
*Arrelato: Mientras aquí no pasa nada, te entretengo un rato.
Deja una respuesta