Érase una niña

Érase una vez una niña con las plantas de los pies negros. Que no usa sandalias, sino andalias, porque no sanda, sino que anda. Que no se tumba en la cama, se sienta: el colchón es su respaldo y la pared, el suelo.

Érase una niña que hace las cosas a su manera.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: